Ventajas del alquiler de vehículos para autónomos
Los primeros pasos en la aventura de ser autónomo suelen ser complicados. A menudo comenzamos con muy poco capital y sabemos que debemos utilizar el dinero del que disponemos con mucha cautela.
Cualquiera que haya emprendido se siente atrapado entre la necesidad de invertir para generar beneficios y las dudas sobre hasta qué punto gastar de lo que tenemos.
Una de las decisiones que pueden traerte más quebraderos de cabeza es el vehículo, en caso que, por el sector al que te dediques, éste sea indispensable para el desarrollo de tu actividad. Nos referimos a furgonetas, furgonetas frigoríficas, furgón, furgón frío, camión, cabeza tractora, semiremolque, grúas o cualquier otro tipo de vehículo especial. Son, desde luego, adquisiciones que requieren un gran esfuerzo económico, aunque esto puede extenderse también a motos y turismos comunes o de nueve plazas.
Tienes, afortunadamente, alternativas. La principal de ellas es sin duda el alquiler. La flexibilidad de esta opción te permite contratar el vehículo para momentos puntuales. Esto es ideal cuando estás dando tus primeros pasos y apenas cuentas con clientes. Los comienzos, todos sabemos, pueden ser largos, irregulares y difíciles, hasta que conseguimos un flujo continuo de trabajo.
El alquiler sigue siendo una opción ideal en el autoempleo. Las tarifas suelen descender cuanto más largos sean los plazos de utilización que contratemos. Los precios y vehículos que ofrece DFM Rent a Car son inmejorables en este sentido. Te animamos a consultar nuestra web donde sin duda encontrarás tu opción ideal.
Existen, por otra parte, otro tipo de opciones, como adquirir un vehículo de segunda mano. También la economía colaborativa ha llegado al mundo del autónomo: Son muchos los que, al montarse un negocio por su cuenta se juntan con otra persona en la misma situación y comparten la utilización de un vehículo. Es una opción viable cuando das tus primeros pasos, pero poco cómoda.
Cabe pensar también en el renting a largo plazo, opción que suele ceñirse a turismos y furgonetas. Esta posibilidad, cada vez más utilizada, es sin duda interesante para pymes y autónomos, puesto que se pueden desgravar las cuotas mensuales del renting hasta el 100%. Y lo mismo sucede con el IVA, si el vehículo está dedicado en exclusividad a la actividad profesional.
No hay que confundir el renting con el leasing. Éste es un contrato de arrendamiento financiero a cuya finalización existe la posibilidad de compra, cosa que en el caso del alquiler no. Además, el leasing, al contrario que el alquiler, no incluye ventajas como servicios de mantenimiento y reparación, seguro o impuestos, que sí se contemplan en el contrato de alquiler.
Ahora que ya sabes de las ventajas de alquilar tu vehículo de empresa, solo te queda elegir el vehículo que mejor se adapte a tus necesidades entre nuestra flota de vehículos industriales.
Tienes, afortunadamente, alternativas. La principal de ellas es sin duda el alquiler. La flexibilidad de esta opción te permite contratar el vehículo para momentos puntuales. Esto es ideal cuando estás dando tus primeros pasos y apenas cuentas con clientes. Los comienzos, todos sabemos, pueden ser largos, irregulares y difíciles, hasta que conseguimos un flujo continuo de trabajo.
El alquiler sigue siendo una opción ideal en el autoempleo. Las tarifas suelen descender cuanto más largos sean los plazos de utilización que contratemos. Los precios y vehículos que ofrece DFM Rent a Car son inmejorables en este sentido. Te animamos a consultar nuestra web donde sin duda encontrarás tu opción ideal.
Existen, por otra parte, otro tipo de opciones, como adquirir un vehículo de segunda mano. También la economía colaborativa ha llegado al mundo del autónomo: Son muchos los que, al montarse un negocio por su cuenta se juntan con otra persona en la misma situación y comparten la utilización de un vehículo. Es una opción viable cuando das tus primeros pasos, pero poco cómoda.
Cabe pensar también en el renting a largo plazo, opción que suele ceñirse a turismos y furgonetas. Esta posibilidad, cada vez más utilizada, es sin duda interesante para pymes y autónomos, puesto que se pueden desgravar las cuotas mensuales del renting hasta el 100%. Y lo mismo sucede con el IVA, si el vehículo está dedicado en exclusividad a la actividad profesional.
No hay que confundir el renting con el leasing. Éste es un contrato de arrendamiento financiero a cuya finalización existe la posibilidad de compra, cosa que en el caso del alquiler no. Además, el leasing, al contrario que el alquiler, no incluye ventajas como servicios de mantenimiento y reparación, seguro o impuestos, que sí se contemplan en el contrato de alquiler.
Ahora que ya sabes de las ventajas de alquilar tu vehículo de empresa, solo te queda elegir el vehículo que mejor se adapte a tus necesidades entre nuestra flota de vehículos industriales.
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