5 formas de reducir los tiempos de entrega de tu furgón con frío

En el transporte de mercancías congeladas o en frío los tiempos son algo casi tan fundamental como la propia cadena de frío. A menudo nos toca improvisar o somos víctimas de dinámicas que el ritmo diario de trabajo nos impide detenernos a analizar y mejorar. Sin embargo, unos pequeños cambios pueden ayudarnos a reducir nuestros tiempos de entrega de transporte en frío. Los consejos que te enumeramos a continuación son válidos también si se trata de trabajos puntuales o si estás pensando en alquilar un furgón con frío.


1. Planifica la ruta de tu furgón con frío

Si se trata de un trayecto que realizas por primera vez, no te limites a subirte a tu furgón con frío de alquiler y poner el navegador en tu móvil. Estudia la ruta el día previo, asegúrate de conocer el camino más corto. Planifícate bien, en especial si vas a tener que hacer un reparto con varios clientes en ciudad. Durante todo el proceso, como sabes, deberás tener un cuidado exquisito para que se mantenga a la perfección la cadena de frío.

2. Infórmate de cortes y obras antes de salir con tu furgón con frío

El segundo consejo se deriva directamente del primero: si vas a circular con tu furgón con frío por zonas con las que no estás familiarizado, es importante que te informes de posibles cortes por eventos u obras en carreteras. A menudo te bastará con preguntarles a tus propios compañeros de trabajo. O puedes recurrir a Internet, donde tienes todo tipo de información a disposición. Existen también plataformas de gestión de flotas que proporcionan datos sobre el tráfico. Como sabes, cuando de producto fresco se trata, a los clientes no les gusta nada esperar, y con razón.

3. Coordina con el cliente la hora de entrega

Si tienes experiencia en la conducción de camiones y en el transporte de mercancías por carretera en general, sabrás que el momento de la entrega, carga y descarga es a menudo aquel en el que más tiempo se pierde innecesariamente. ¡Cuántas horas puede pasar un camionero o repartidor en muelles y centros logísticos a la espera de poder seguir su ruta! Por ello, en la medida de lo posible, hay que coordinar con el cliente las horas de entrega y recogida. Son, además, operaciones que a menudo requieren cuidado y tiempo, y que no deben prolongarse demasiado por el bien de la mercancía, en especial si es perecedera, como la que nos ocupa en este artículo.

4. Planifica con tiempo los picos altos 

Probablemente seas un profesional altamente experimentado en el transporte de mercancías en frío, con lo que conoces a la perfección cuáles son los momentos álgidos y los parones de actividad en tu sector. Quizá te dediques a transportar productos estacionales. O tal vez a otros cuya demanda no decae a lo largo del año. Sea como sea, lo importante es que los picos no te pillen sin los recursos y la planificación necesarias. Contrata personal extra para esas fechas cruciales y, si requieres más parque móvil para dar satisfacción a los clientes, puedes recurrir a alquilar furgonetas con frío.

5. Mantenimiento adecuado del furgón con frío

Como dice el dicho, más vale prevenir que curar. Un adecuado y periódico mantenimiento de tu furgón con frío es la mejor garantía para minimizar el riesgo de imprevistos relacionados con averías. Un vehículo que no arranca cuando menos te lo esperas es lo último que uno quiere si se dedica al transporte y al reparto. Eso por no hablar de consideraciones relativas a la seguridad.

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